Recirculación de Gases de Combustión
El empleo de un vario porcentaje de los gases de descargue para reducir la temperatura de llama del quemador, inyectándolos en el aire secundario, representa una tecnología de «dilución» que tiene el objetivo de conseguir una llama más «blanda» y «fría» disminuyendo el aire en exceso.
Reduciendo la concentración de oxígeno se reduce en efecto la temperatura de llama, y consecuentemente la formación de NOx de origen térmico.
Otro efecto de la recirculación de los gases de combustión es reducir al mínimo los niveles de CO, porque debido a su reingreso en el ciclo si consiguen una combustión prácticamente completa.
Naturalmente deben ser tomadas muchas precauciones para asegurar la estabilidad de llama y sea por la presencia de partículas dentro del quemador que va de propósito filtrado.